Este documental de los realizadores irlandeses Kim Bartley y Donnacha O'Brien, de 74 minutos de duración, es un extraordinario recuento de los tensos momentos vividos en Venezuela a partir del golpe de Estado del 11 de abril de 2002 y la formidable reacción del pueblo y de jóvenes militares leales que restituyó al Presidente Hugo Chávez Frías en la madrugada del 14 de abril, e incluye imágenes inéditas de los acontecimientos en el interior del Palacio de Miraflores durante aquellas históricas jornadas. Se sigue paso a paso los tramos clave del golpe en Caracas, y la volatilidad de la dictadura más corta de la historia latinoamericana, con apenas 47 horas de duración.
Uno de los aspectos centrales, quizá la razón de ser periodística del documental, es aquellaa que muestra los registros de imágenes y audios inéditos hasta su edición, donde los canales de televisión confiesan cómo organizaron el golpe junto a un sector del alto mando militar. Tal manifestación de golpismo convicto y confeso, jamás registrado en la repleta lista de golpes latinoamericanos (se cuentan 283 golpes desde 1929 hasta 2001), constituye un verdadero impacto periodístico, semiótico y político. La proyección del documental alrededor del mundo y el efecto que está causando ha llevado a la oposición a desatar una campaña de presión para que el mismo no sea proyectado en algunos recintos y no participe en festivales de cine.
No obstante, el mismo ha sido premiado en varias oportunidades tanto en América como en Europa, y su proyección en un lugar tan emblemático como la Casa de América de Madrid es un paso importante en el camino de lograr que quede develada la verdad del golpe. Esto es significativo sobre todo cuando en España ha sido galardonado con el premio "Rey de España", el camarógrafo que filmó las imágenes donde aparece un grupo de militantes "chavistas" defendiendo a tiros el hoy famoso Puente Llaguno, al lado del Palacio de Miraflores, imágenes que fueron manipuladas al no mostrarse que hacia ese puente disparaban los francotiradores golpistas y la Policía Metropolitana del Alcalde Mayor de Caracas, uno de los principales promotores del golpe.
Este video con imágenes manipuladas dio la vuelta al mundo y ha servido para acusar al gobierno venezolano y a sus seguidores de las muertes acaecidas durante esos fatídicos hechos.
Uno de los aspectos centrales, quizá la razón de ser periodística del documental, es aquellaa que muestra los registros de imágenes y audios inéditos hasta su edición, donde los canales de televisión confiesan cómo organizaron el golpe junto a un sector del alto mando militar. Tal manifestación de golpismo convicto y confeso, jamás registrado en la repleta lista de golpes latinoamericanos (se cuentan 283 golpes desde 1929 hasta 2001), constituye un verdadero impacto periodístico, semiótico y político. La proyección del documental alrededor del mundo y el efecto que está causando ha llevado a la oposición a desatar una campaña de presión para que el mismo no sea proyectado en algunos recintos y no participe en festivales de cine.
No obstante, el mismo ha sido premiado en varias oportunidades tanto en América como en Europa, y su proyección en un lugar tan emblemático como la Casa de América de Madrid es un paso importante en el camino de lograr que quede develada la verdad del golpe. Esto es significativo sobre todo cuando en España ha sido galardonado con el premio "Rey de España", el camarógrafo que filmó las imágenes donde aparece un grupo de militantes "chavistas" defendiendo a tiros el hoy famoso Puente Llaguno, al lado del Palacio de Miraflores, imágenes que fueron manipuladas al no mostrarse que hacia ese puente disparaban los francotiradores golpistas y la Policía Metropolitana del Alcalde Mayor de Caracas, uno de los principales promotores del golpe.
Este video con imágenes manipuladas dio la vuelta al mundo y ha servido para acusar al gobierno venezolano y a sus seguidores de las muertes acaecidas durante esos fatídicos hechos.